Manuel Nieves

Estuve 30 minutos diciendo "chale" despúes de terminar el libro. Tiene un lenguaje muy aterrizado, no es rebuscado ni sobredescriptivo, es simple pero no por eso menos profundo. La autora muestra los matices grises de todos los personajes y la narración lo hace a uno perder y luego recuperar la fé en la humanidad. Chale.

Despegue acelerado y aterrizaje súbito, pero igual severo viaje. Necesitaré una dosis de procesinol de qué-monda-acabo-de-leer-icilina.

¡Que parche João Grilo! Jajajajaj dios mío, o mejor dicho "Yo mío".

¿Que hacer ante el abismo insoslayable? ¿Cómo lidiar con lo que nos atormenta? Como la nave de Teseo, ningún personaje es el mismo después de tantas cosas, y ni siquiera el lector encuentra respuestas. Me gustó el estilo de Sábato.

Conceição Evaristo escribe sangrando y rie llorando. Leeré con certeza más de ella.