All Your Perfects
2018 • 305 pages

Ratings96

Average rating3.9

15

5 llorosas y destrozadas de amor ESTRELLAS.

Esta mujer... lo ha hecho de nuevo.

RESEÑA

Hace unos dos años, conocí a Colleen Hoover por medio del libro It Ends with Us, el primero que leí de ella. Nunca había experimentado nada de CoHo, y sobra decir que el libro me sorprendió de manera gratificante y rompió mi corazón. Luego intenté con Too Late, uno que causó muchas reseñas mixtas. No quise probar más de ella hasta ahora, con este nuevo que sacó hace poco, All Your Perfects. No estaba segura de qué trataba, salvo que estaba causando increíbles opiniones y en cierta manera lo asemejaban a It Ends with Us.
No sé qué libro fue peor para mi corazón.

All Your Perfects nos relata, desde su punto de vista, la historia de Quinn Whitley quien conoce a Graham Wells luego de ambos sorprender a sus respectivas parejas engañándolos mutuamente (la novia de Graham tenía sexo con el prometido de Quinn). Ese encuentro marcó un punto y aparte en la vida de ambos tanto, que la atracción mutua comenzó y no se intensificó sino hasta unos meses después cuando volvieron a encontrarse. La historia está contada en dos tiempos, alternados de un capitulo a otro, en pasado y presente. En el pasado, Quinn nos relata cómo inició su relación con Graham y lo bien que conectaban el uno con el otro; cómo se conocían, se enamoraban cada vez más, tenían sexo, conocían la familia del otro, se comprometían, etc. En el presente, ahora con siete años de casados, Quinn cuenta lo duro que está resultando el matrimonio desde que descubrieron la alta infertilidad en ella que causaba no pudieran tener un hijo, lo mucho que le afectaba ese hecho a ella, y desembocando en una gravísima crisis matrimonial, pues poco a poco la pareja comenzaba a distanciarse, a perder la esperanza y lo que en un inicio les unió. Tanto así, que tenían una caja especial que solo abrirían en un caso desesperado, una caja que inspiraba pánico en ambos, sobre todo Graham, pues ese caso desesperado no es otro más que el divorcio. Entonces, ¿el amor podrá ser más poderoso o sucumbirá a la tormenta? ¿Qué hay dentro de esa misteriosa caja?

No he leído antiguas –y primeras– obras de Colleen, pero lo que fueron It Ends with Us, y ahora All Your Perfects, tocan temas tan fuertes e importantes que lograron llegarme al alma. Colleen nos relata lo que sufre una pareja en apariencia perfecta cuando es incapaz de poder concebir un hijo. El sufrir de las desilusiones, de la culpa, el resentimiento y sí, el odio también. De cómo dicha pareja trata de mantenerse unida y de seguir luchando, hasta el punto de agotar todos los recursos.

Quinn es una joven independiente. Su madre no es la mejor de todas, y aun así Quinn desea ser una mejor madre, ¡desea ser madre!, con todas sus ansias posibles. Después de la decepción que fue su prometido, ve en Graham como lo mejor que le ha pasado. Graham se volvió su mejor amigo, su amante, su compañero de aventuras, su fortaleza, su apoyo. Su todo. Ella desea, anhela, poder formar una familia con él, y en cuanto descubre que no es posible, se culpa a sí misma; cada mes que no puede quedar embarazada, cada vez que rehúye al contacto de su esposo, cada vez que rechaza tener sexo pues representa otra desilusión más. Cree que la tristeza de Graham es debido a que ella no puede darle un hijo y se piensa que tal vez Graham sería más feliz si pudiera estar con alguien que sí le da lo que ella no puede a pesar de los sentimientos que siente por él.

Graham... Oh, en verdad quisiera que en mi vida me tocara un ser como él. No porque sea perfecto, Graham tiene sus imperfecciones y eso es lo que le hace humano. Es divertido, paciente, apasionado, tierno, también es arrogante, un tanto egoísta, directo y como todos, es un ser humano que, en estos momentos, no sabe qué hacer para ayudar a Quinn y eso le frustra. Le entristece. Lo devasta. Él... Quiero decirlo todo y a la vez sé que el factor de la sorpresa es lo que impacta en esta novela, así por una parte voy a contenerme.

El punto fuerte de la novela es el conflicto de la pareja. Llegados a la mitad, por mi parte, me interesaba más el presente que el pasado. Quería saber cómo, necesitaba saber de qué forma iban a terminar y en muy pocas páginas me conquistó tanto que, el pensar que llegarían a divorciarse me causaba tal dolor como si se tratase de mi propio matrimonio. Y eso es lo cómico...

No estoy casada. No tengo novio, nunca lo he tenido y no me avergüenza decirlo. He dicho a mi familia que no tengo planes de casarme y que pueden considerarme la solterona virgen de la familia. No tengo complejos con respecto a ello. Sin embargo, aunque no he tenido experiencia en el campo, no me explico como soy capaz de entrar tan profundo en este tipo de historias, cómo es que Colleen es capaz de adentrarme tan profundo en esta espiral, que me sentí tan angustiada por Quinn y Graham como si, y lo dije, fuera mi propia relación. Lo mismo sucedió en It Ends with Us. Pero, claro está que cada cabeza es un mundo y cada persona toma una decisión diferente, lo mismo aplica para este caso tal cual pasó en IEWS.

Me gustan los bebés. Me parecen adorables, huelen bien, me divierten y me gusta cargarlos. Pero no tengo el instinto maternal de ser madre. Ni siquiera por adopción. Más bien, opinión mía-MÍA, me enervan las mujeres que creen que ser madre es un requisito fundamental para sentirse mujer. Razón por la que en muchas ocasiones durante la lectura me enojaba con Quinn. Me enojaba con su obsesión por quedar embarazada, me enojaba con su pensamiento de que necesitaba un bebé para salvar el matrimonio, me enojaba que necesitaba un bebé para hacer feliz a Graham, ¡me enojaba que antepusiera su deseo de ser madre por encima de su matrimonio! Graham incluso lo menciona una vez, que pensaba que el sexo es para ella el único requisito para quedar embarazada, en un intento de decir que solo tenían relaciones sexuales por necesidad y no por gusto. Y sí, también puedo comprender a Quinn. Puedo comprender lo mal que se sentía por no ser capaz de tener un hijo, puedo comprender todas sus angustias, pero no me es suficiente justificación para el daño que estaba haciendo. Más que Graham, era a Quinn a quien consideraba egoísta. Se supone que... amar es anteponer la felicidad del otro antes que la tuya, Graham la amaba más que a sí mismo e incluso, por mucho que le doliera y a pesar de todo, sería capaz de darle el divorcio a Quinn si era eso lo que ella quería... Graham luchaba..., luchaba con todo lo que tenía para salvar el matrimonio, luchaba por los dos, luchaba por el amor que le tenía a Quinn... ¿por qué mierdas ella no hacía lo mismo?
...
Puedo percibir que también Quinn podría tener depresión, y es una enfermedad mucho peor al cáncer. Lo sé, porque lo tuve, gracias a todo lo bueno no a un nivel alto. Pero aun con eso, yo... no sé. Me siento aún muy enojada y a veces dolida con las decisiones que en un inicio Quinn cometió. En una realidad, Quinn tenía a un hombre maravilloso a su lado, que hacía todo por ella...

El final... y el epílogo. Oh, mi dios, yo estaba hecha un mar de lágrimas con ese final y ese epílogo. Y no porque terminara mal –Bendito sea porque todo no terminó mal– si no porque las cosas salieron bien pero hubieron detalles que me rompieron el corazón, me lo repararon, me lo volvieron a romper y luego le hicieron cirugía y me curaron. Sobre todo el epílogo, porque ¡fue tan hermoso! De los tres finales que he leído de CoHo, All Your Perfects se lleva el premio como favorito.

Como It Ends with Us, All Your Perfects deja una enseñanza muy valiosa para el lector: si solo te fijas en tus defectos, todo lo perfecto que tengas en tu vida pasará a un segundo plano que no te darás de cuenta de lo que tienes, por ejemplo, tu pareja. Quinn se enfocaba tanto, se obsesionó tanto, en su defecto de infertilidad que no se daba cuenta de la hermosa persona que tenía como esposo. Si tú, que lees esto, tienes un novio/novia, esposo/esposa, no te mortifiques con lo negativo de ti, vive el presente y disfruta la felicidad. Habrán maravillosos días, y tormentas de clasificación 5, pero no existe el matrimonio perfecto. Sino un amor tan perfecto, capaz de superar las imperfecciones de ambos.


September 3, 2018