Un delicioso reencuentro con un clásico. Este libro me lo recomendó mi papá cuando ya tenía unos 16 años. Recuerdo que me gustó mucho pero no recordaba mucho más detalles. Ahora que lo leo 26 años después, no creo que en ese tiempo haya entendido ni la mitad de lo que leí. El libro es sumamente interesante y pensando en el tiempo en el que se escribió es leer a alguien que profetizó muchas cosas que al día de hoy sigue sucediendo en la Iglesia. Muy recomendable lectura.