Mi cerebro no termina de digerir que esto es crónica y no ficción. Duele, asquea y te hace llorar de impotencia, pero es muy buena la manera de relatar de Fernanda.
Mi cerebro no termina de digerir que esto es crónica y no ficción. Duele, asquea y te hace llorar de impotencia, pero es muy buena la manera de relatar de Fernanda.